Objetos inútiles se convierten en máscaras llenas de color y rebosantes de fantasía. Unos seres que surgen de elementos descartados para asombrarnos con una nueva utilidad.
Las creaciones han sido fabricadas a partir de botellas de plástico, cables, retales de tela, gomillas, esponjas y cuerdas que se desechan y terminan en la basura o reciclaje. Son máscaras creadas desde lo teatral siguiendo un proceso manual hasta su apariencia final.